Palestina advirtió al próximo gobierno israelí que no cambie el statu quo en Jerusalén Oriental ocupada.
Esto luego de que, el político extremista y racista, Itamar Ben-Gvir será el próximo ministro de Seguridad Nacional de Israel en el próximo gobierno, en virtud de un acuerdo de coalición alcanzado con el primer ministro designado Benjamin Netanyahu.
“El acuerdo entre Netanyahu y Ben-Gvir le otorga enormes poderes para poner en práctica sus políticas y programas extremistas y racistas, incluida la realización de cambios amplios y radicales en el statu quo histórico y legal existente en el lugar sagrado”, declaró el Ministerio de Relaciones Exteriores palestino en un comunicado.
“Realizar cualquier cambio en el statu quo de la mezquita de Al-Aqsa es una amenaza directa que hará estallar el conflicto en toda la región”, advirtió el ministerio.
El comunicado pide a la comunidad internacional que se mantenga cauta ante los peligros que suponen las intrusiones de los colonos israelíes en la mezquita de Al-Aqsa.
A primera hora del domingo, el Departamento de Dotación de Jerusalén, gestionado por Jordania, dijo que decenas de colonos israelíes irrumpieron en el complejo de la mezquita de Al-Aqsa, que es un punto conflictivo.
Ben-Gvir tiene opiniones de extrema derecha sobre los palestinos. En repetidas ocasiones se ha unido a los colonos israelíes para asaltar el complejo de la mezquita de Al-Aqsa, en la Jerusalén oriental ocupada.
Anteriormente había pedido el desplazamiento de los palestinos y provocó una ola de escalada en Jerusalén Este tras establecer una oficina en el barrio de Sheikh Jarrah.
A principios de este mes, el presidente israelí Isaac Herzog dijo en un audio filtrado que “el mundo entero está preocupado” por las opiniones de extrema derecha de Ben-Gvir.
Para los musulmanes, Al-Aqsa representa el tercer lugar más sagrado del mundo. Los judíos, por su parte, se refieren a la zona como el “Monte del Templo”, alegando que ha sido el sitio de dos templos judíos en la antigüedad.