Las fuerzas de ocupación israelíes hirieron al fotoperiodista palestino Momen Samreen con una bala de goma en la cabeza, a pesar de llevar atuendo de prensa, mientras cubría una incursión militar israelí en Ramallah, al tiempo que demolían la casa de cuatro plantas del detenido palestino Islam Froukh, desplazando a sus residentes.

Durante la misma operación, otro periodista, Rabie Munir, también habría sido herido en el abdomen por balas de goma israelíes.

Al parecer, los soldados israelíes dispararon balas de goma y bombas lacrimógenas contra los palestinos, lo que provocó enfrentamientos entre jóvenes palestinos y las fuerzas.

Durante la incursión, las tropas israelíes han herido a seis palestinos, tres de ellos con balas reales, según el Ministerio de Sanidad palestino.

En los últimos meses, Israel ha intensificado los ataques en las ciudades y pueblos ocupados de Cisjordania, así como en Jerusalén, a consecuencia de los cuales han muerto decenas de palestinos y muchos otros han sido detenidos.

Las incursiones israelíes se han llevado a cabo sobre todo en las ciudades cisjordanas de Yenín y Nablús, donde las fuerzas israelíes han intentado reprimir una creciente resistencia palestina contra la ocupación.

La ocupación israelí derriba sistemáticamente casas palestinas con el pretexto de construir sin permisos, que son casi imposibles de obtener para los palestinos. Posteriormente, se construyen asentamientos israelíes y los colonizadores israelíes viven en tierras palestinas.

Más de 700.000 colonos israelíes viven en más de 230 asentamientos construidos desde 1967, que son ilegales según el derecho internacional.

El Representante Especial de la Unión Europea para los Derechos Humanos, Eamonn Gilmour, ha subrayado hoy jueves que los asentamientos israelíes, las demoliciones de viviendas palestinas y el desplazamiento forzoso de palestinos son totalmente ilegales.