Canadá ha solicitado formalmente a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) que rechace la petición de la Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU) de emitir una opinión consultiva sobre las consecuencias jurídicas de la ocupación y anexión israelíes de territorio palestino.

Esta decisión ha provocado la indignación de los grupos de derechos humanos, que acusan a Canadá de hipocresía y complicidad en las violaciones del derecho internacional cometidas por Israel.

En diciembre de 2020, la Asamblea General de las Naciones Unidas votó por 87 votos a favor y 26 en contra pedir a la CIJ que emitiera un dictamen sobre la ilegalidad de la “prolongada ocupación, colonización y anexión” de territorio palestino por parte de Israel, y Canadá votó en minoría en contra de la resolución.

En una carta fechada el 14 de julio de 2023, obtenida por Canadienses por la Justicia y la Paz en Oriente Medio (CJPME), Canadá ha pedido ahora formalmente a la CIJ que “rechace la petición” de la AGNU.

La carta de Canadá argumenta que la CIJ no debe aceptar la petición de la AGNU porque Israel “no ha dado su consentimiento para que la CIJ conozca de este asunto”. Canadá también afirma que la ocupación israelí no es “responsabilidad primaria” de la Asamblea General, sino del Consejo de Seguridad de la ONU, “que ha establecido un marco para permitir la resolución de la disputa a través de negociaciones de las partes.”

CJPME, organización sin ánimo de lucro que aboga por la paz y los derechos humanos en Oriente Medio, ha denunciado la intervención de Canadá como “profundamente hipócrita” y “una afrenta a los legítimos agravios y necesidades de derechos humanos del pueblo palestino”.

El CJPME señala que Canadá se ha pronunciado enérgicamente contra la ocupación rusa de Ucrania, pero está dispuesto a denegar el acceso a la justicia a los palestinos para proteger a Israel de la rendición de cuentas.

El CJPME también señala que el gobierno de extrema derecha de Israel ha tomado numerosas medidas para consolidar una anexión ilegal de facto del territorio palestino en Cisjordania, como la publicación de una declaración de principios rectores que afirma un derecho “exclusivo” a “todas las partes de la Tierra de Israel”, el avance de 15 nuevos asentamientos ilegales y más de 7.000 unidades de asentamientos ilegales, y la realización de un cambio significativo en su gobernanza sobre Cisjordania que se entiende ampliamente que equivale a la anexión de jure del territorio.

El CJPME insta al gobierno canadiense a que dé marcha atrás en su postura y apoye la opinión consultiva de la CIJ sobre la ocupación y anexión israelíes, así como a que imponga sanciones a los funcionarios israelíes responsables de estas acciones. El CJPME sostiene que ahora, más que nunca, es necesaria la condena internacional para obligar a Israel a poner fin a sus abusos contra los derechos humanos de los palestinos.