Un grupo de colonos israelíes destruyó un sistema de agua potable en la aldea de Kisan, al este de la ocupada Belén.

Fuentes locales informaron de que varios colonos israelíes del asentamiento “Maali Amos”, situado en tierras de ciudadanos palestinos, destruyeron un sistema de agua potable en la zona de Khallet Al-Hamr, al sureste de la aldea, perteneciente al ciudadano palestino Hassan Yousef Al-Abyat.

Las fuentes también indicaron que el ciudadano palestino Abyat había sido atacado por colonos israelíes en varias ocasiones, y añadieron que los colonos israelíes habían instalado una tienda en esa zona, con el objetivo de apoderarse de las tierras.

En su reciente informe, el Centro de Información Israelí para los Derechos Humanos (B’Tselem) afirmó que Israel ha venido aplicando una política ilegal sistemática que demuestra la profunda deshumanización que han sufrido los palestinos, que padecen una crisis crónica de agua en los territorios ocupados.