Catorce legisladores demócratas instaron a la administración Biden a emprender un cambio fundamental en su enfoque del “conflicto palestino-israelí”, a garantizar que los fondos de los contribuyentes estadounidenses no están apoyando proyectos de asentamientos israelíes y a determinar si la ayuda militar estadounidense viola la Ley de Control de Exportación de Armas.

Encabezada por el representante Jamaal Bowman y el senador Bernie Sanders, la carta insta al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y al secretario de Estado, Antony Blinken, a “emprender un cambio en la política estadounidense en reconocimiento del empeoramiento de la violencia, la nueva anexión de tierras y la negación de los derechos de los palestinos”.

“Sólo protegiendo la democracia, los derechos humanos y la autodeterminación de todos los palestinos e israelíes podremos alcanzar una paz duradera”, afirman los legisladores en la carta.

La carta fue firmada además por Cori Bush, Andre Carson, Summer Lee, Betty McCollum, Alexandria Ocasio-Cortez, Ilhan Omar, Ayanna Pressley, Rashida Tlaib, Raúl Grijalva, Bonnie Watson Coleman, Jesús “Chuy” García y Delia Ramírez.

Los legisladores progresistas pidieron además a la administración Biden que garantice que los fondos de los contribuyentes estadounidenses no están apoyando proyectos de asentamientos israelíes, y que determine si la ayuda militar estadounidense viola la Ley de Control de Exportación de Armas o la llamada “Ley Leahy”.

La Ley de Control y Exportación de Armas estipula que las armas estadounidenses sólo se venden para legítima defensa, mientras que la Ley Leahy prohíbe que la financiación estadounidense se utilice para equipar o entrenar a fuerzas militares extranjeras sospechosas de abusos de los derechos humanos o crímenes de guerra.

Los legisladores añadieron: “Además, pedimos a su administración que garantice que toda la ayuda exterior futura a Israel, incluidas armas y equipos, no se utiliza para apoyar graves violaciones de los derechos humanos, incluso reforzando la supervisión del uso final y el seguimiento financiero. Le pedimos que responda con un plan detallado sobre cómo piensa la administración lograr ese objetivo”.

Thy también hizo hincapié en que están “profundamente preocupados por los movimientos del gobierno israelí que demuestran que la anexión ilegal de facto y de jure de la Cisjordania ocupada está muy avanzada”, subrayando que “la misión antidemocrática de este gobierno israelí para desmantelar el Estado de derecho es una amenaza tanto para los israelíes como para los palestinos”.

“Sabemos que su administración se ha reunido en repetidas ocasiones con funcionarios israelíes para reiterar el apoyo de Estados Unidos a ‘medidas iguales de libertad, dignidad, seguridad y prosperidad’ tanto para israelíes como para palestinos. Lamentablemente, estas súplicas de buena fe no han surtido efecto”, señalaron.

Añadieron que el aplazamiento por parte de Israel de la revisión judicial prevista no logrará “disminuir la violencia sistémica contra los palestinos, incluida la anexión de tierras palestinas”. Las acciones del gobierno israelí suponen una clara violación del derecho internacional y de los compromisos adquiridos con Estados Unidos; su programa devastará aún más las comunidades palestinas y aumentará la tensión con consecuencias violentas tanto para palestinos como para israelíes. Sólo pasos claros para cambiar las condiciones políticas allanarán el camino hacia la paz”.