La agresión israelí contra la ciudad ocupada de Yenín, en Cisjordania, y su campo de refugiados, en la que murieron al menos 12 palestinos, puede constituir un crimen de guerra, afirmaron expertos de la ONU.

Los expertos son Francesca Albanese, relatora especial sobre la situación de los derechos humanos en los territorios palestinos ocupados desde 1967, Reem Alsalem, relatora especial sobre la violencia contra las mujeres y las niñas, y Paula Gaviria Betancur, relatora especial sobre los derechos humanos de los desplazados internos.

“Las operaciones de las fuerzas israelíes en Cisjordania ocupada, en las que mataron e hirieron gravemente a la población ocupada, destruyeron sus hogares e infraestructuras y desplazaron arbitrariamente a miles de personas, constituyen violaciones atroces del derecho y las normas internacionales sobre el uso de la fuerza y pueden constituir un crimen de guerra”, afirmaron los expertos.

Y añadieron: “Los ataques fueron los más feroces en Cisjordania desde la destrucción del campo de Yenín en 2002”.

El 3 de julio, la ocupación israelí lanzó una operación militar sobre la ciudad y el campo de Yenín, en la que participaron más de 1.200 soldados israelíes, matando al menos a 12 palestinos, entre ellos cinco niños, e hiriendo a más de 100, 20 de ellos de gravedad.

Los ataques obligaron a huir a miles de palestinos y dañaron infraestructuras, casas y edificios de apartamentos.

Según informes, más de 4.000 ciudadanos palestinos huyeron del campo de refugiados de Yenín durante la noche del lunes al martes, tras los mortíferos ataques aéreos israelíes sobre el campo.

Expertos de la ONU señalaron que se impidió el acceso de muchas ambulancias al campo de refugiados de Yenín para evacuar a los heridos.

“Es desgarrador ver cómo miles de refugiados palestinos, desplazados desde 1947-1949, se ven obligados a abandonar el campo atemorizados a altas horas de la noche”, señalaron.

Los expertos añadieron que la denominada operación militar israelí “antiterrorista” no encuentra justificación alguna en el derecho internacional.

Subrayaron: “Los ataques constituyen un castigo colectivo contra el pueblo palestino, al que las autoridades israelíes han calificado de “amenaza colectiva para la seguridad”.”

Los expertos de la ONU pidieron que la ocupación israelí rindiera cuentas ante el derecho internacional por su ocupación ilegal de Palestina y los actos violentos cometidos contra ellos.

“Los palestinos del territorio palestino ocupado son personas protegidas por el derecho internacional, a las que se garantizan todos los derechos humanos, incluida la presunción de inocencia”, afirmaron.

Los expertos subrayaron: “Para que esta violencia implacable termine, la ocupación ilegal de Israel debe terminar. No puede corregirse ni mejorarse en los márgenes porque está mal hasta la médula”.