Las autoridades de ocupación israelíes se disponen a demoler las casas de las familias de dos palestinos que fueron asesinados en un puesto de control a las afueras de la ciudad de Yenín, en el norte de Cisjordania.
Hani Abed ha declarado que ha sido informado de la decisión de las autoridades de ocupación de derribar las casas de Ahmed Ayman Abed, de 23 años, y Abdulrahman Hani Abed, de 22, primos de Kafr Dan, que fueron asesinados.
Los dos murieron en el puesto de control de Jalama tras un tiroteo de soldados israelíes destacados en la zona.
Añadió que la demolición de las dos casas, que ocupan una superficie de 250 metros cuadrados, se llevaría a cabo en los próximos cuatro días, es decir, a finales de este mes.
Las fuerzas israelíes ya han saqueado las casas y han tomado medidas para trazar un mapa de las mismas en preparación de la demolición.
Israel recurre a la demolición punitiva de las viviendas familiares de los palestinos -como medio de disuasión- acusados de estar implicados en ataques contra israelíes, una política que Israel no aplica a los colonos israelíes implicados en ataques mortales contra palestinos.
Esta política fue ampliamente condenada por los grupos de derechos humanos como “un castigo colectivo” y “un crimen de guerra y de lesa humanidad”.