El ministro de Finanzas del régimen de Ocupación, Bezalel Smotrich afirmó que las actividades de asentamientos ilegales en Cisjordania ocupada continuarán sin cesar.

“No habrá ninguna congelación de la construcción en Judea y Samaria y punto”, declaró Bezalel Smotrich, refiriéndose a la Cisjordania ocupada.

Las declaraciones de Smotrich se produjeron menos de una semana después de que la ONU anunciara que el régimen israelí había demolido, obligado a demoler o confiscado 88 estructuras de propiedad palestina en las tierras ocupadas por los palestinos en un intervalo de unas tres semanas el mes pasado.

El informe de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas (OCAH) en Palestina ofrecía datos desalentadores en su informe quincenal sobre la protección de civiles, que abarcaba el periodo comprendido entre el 10 y el 30 de enero.

Más de tres millones de palestinos viven en Cisjordania, ocupada por el régimen israelí desde 1967, cuando emprendió una guerra contra los palestinos respaldada por Occidente.

Desde 1948, la ocupación israelí ha construido cientos de asentamientos ilegales en las tierras palestinas ocupadas para asentar a cientos de miles de colonos israelíes.

Cabe señalar que la población de colonos israelíes en Cisjordania ocupada ha superado el medio millón, según las últimas cifras.

A principios de este mes, la ocupación israelí aprobó planes para la construcción de más de mil nuevas unidades de colonos ilegales en la ciudad santa ocupada de Jerusalén.

La ocupación israelí ha intensificado sus actividades de expansión de asentamientos ilegales y sus políticas de apropiación de tierras desde finales de diciembre, cuando Netanyahu volvió a ocupar el cargo de primer ministro al frente de un gabinete en el que participan partidos de extrema derecha y ultraortodoxos.