El primer ministro palestino, Muhammad Shtayyeh, recibió al Coordinador Especial de las Naciones Unidas para el Proceso de Paz en Medio Oriente, Tor Wennesland,  y denunció a la comunidad internacional que deje de utilizar con doble estandar la aplicación del derecho internacional cuando se trata de Palestina.

También destacó que la próxima reunión del Comité Ad Hoc de Enlace (AHLC) que tendrá lugar en la capital belga, Bruselas, el 10 de mayo, para debatir el plan de reforma integral preparado por el gobierno palestino, se verá obstaculizada si Israel no libera los ingresos fiscales que debe a la Autoridad Palestina.

El AHLC es un comité de 15 miembros formado por Estados Unidos, la Unión Europea, las Naciones Unidas, el Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial, Rusia, Japón, Arabia Saudí, Canadá, Jordania, Egipto, Túnez, Noruega, Israel y Palestina.

Israel recauda los ingresos fiscales en nombre de la Autoridad Palestina y los transfiere mensualmente tras deducir una parte para cubrir los gastos de electricidad y los gastos de traslado médico en los hospitales israelíes.

También ha estado reteniendo parte de los impuestos que, según dice, la AP utiliza para pagar a las familias de los presos y ex presos palestinos que estuvieron en las cárceles de la ocupación.

El apoyo financiero internacional a la AP ha disminuido a lo largo de los años. Hasta 2013, se transfirieron casi mil millones de dólares a la Autoridad Palestina en apoyo directo al presupuesto, de los cuales aproximadamente un tercio procedía de Estados Unidos, un tercio de la Unión Europea y un tercio de los países árabes, sobre todo de Arabia Saudita.

Fuente: Middle East Monitor