El Reino Unido ha sido acusado de “tratar de impedir que la Corte Internacional de Justicia (CIJ) aborde importantes cuestiones de derecho internacional humanitario” en un informe presentado al tribunal mundial sobre la legalidad de la ocupación israelí de Palestina.

El Reino Unido presentó el mes pasado un dictamen jurídico de 43 páginas, al que tuvo acceso The Guardian, como parte de la fase de investigación de la CIJ previa a una opinión consultiva prevista del tribunal sobre las consecuencias jurídicas de la “ocupación, asentamiento y anexión” de tierras palestinas.

El “amicus brief” del Reino Unido se opone frontalmente a la vista del caso en la CIJ, una postura que sólo comparten unos pocos de los 57 dictámenes enviados al tribunal por Estados miembros y organizaciones no gubernamentales.