Las fuerzas de ocupación israelíes irrumpieron en la escuela primaria para niñas Izzariyeh, situada al este de Jerusalén.
Según Sireen Faroun, directora de la escuela, tanto las profesoras como las alumnas estaban conmocionadas por la magnitud de los daños causados durante la incursión. Los soldados israelíes forzaron las puertas, registraron las aulas y confiscaron cámaras de circuito cerrado de televisión.
El resultado fueron cuantiosos daños materiales.
El Ministerio de Educación palestino denunció la destrucción de las instalaciones escolares por parte del ejército israelí, condenándola como una clara violación de los derechos humanos y del derecho fundamental de los niños a recibir un entorno de aprendizaje seguro.
El ministerio subrayó que este incidente pone de relieve las difíciles circunstancias que afrontan los estudiantes y profesores palestinos en la Jerusalén ocupada debido a la guerra en curso contra las instituciones educativas.
También hizo un llamamiento a las instituciones y organizaciones internacionales, de derechos humanos y de medios de comunicación para que asuman sus responsabilidades a la hora de hacer frente a la escalada de violaciones de la ocupación israelí.
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El acoso israelí a los escolares palestinos es habitual, así como la obstrucción del acceso de los estudiantes a sus escuelas y la intimidación, incluido el despliegue de un gran número de tropas en los alrededores.
En mayo, soldados israelíes irrumpieron en la escuela primaria Al-Kurom e interrogaron a punta de pistola a alumnos y profesores palestinos, amenazando con disparar a quien intentara escapar.
El incidente se produjo después de que diez países europeos, entre ellos Bélgica, Francia, Italia, España, Suecia, Reino Unido, Dinamarca, Finlandia, Alemania, Irlanda y la Oficina del Representante de la Unión Europea en Cisjordania y Gaza, pidieran a Israel que pusiera fin a su política de demolición de viviendas y confiscación de propiedades palestinas en Cisjordania ocupada.
Israel ocupa Cisjordania desde 1967 y a diario se cometen abusos contra los derechos humanos de los palestinos e infracciones del derecho internacional.