Al-Hawiya, uno de las decenas de manantiales de agua del histórico distrito de Husan, en la ciudad ocupada de Belén, en Cisjordania, se enfrenta a la amenaza de usurpación por parte de Israel.

Situado en un valle rodeado de olivos, entre huertos, el agua del manantial de Al-Hawiya procede de las montañas de Husan y se acumula en un pequeño estanque artificial.

El manantial y el estanque de Al-Hawiya, con sus bellezas naturales, son un lugar que permite a los habitantes del pueblo y a los palestinos de distintas ciudades de Cisjordania tomar un poco de aire fresco y descansar.

Los propietarios de los huertos que rodean el estanque también utilizan el agua del manantial para las verduras que cultivan.

Sin embargo, se teme que Israel, que anteriormente confiscó unas 1700 hectáreas de tierra pertenecientes al distrito de Husan y estableció aquí el asentamiento ilegal “Betar”, usurpe ahora este lugar, que tiene características turísticas e históricas.

En su reunión semanal, el gabinete israelí aprobó la asignación de un presupuesto de 120 millones de shekels (33 millones de dólares) para tres años, como parte del proyecto de resolución presentado por el ministro de Asuntos de Jerusalén y Patrimonio, Amihai Eliyahu, el ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, y el ministro de Turismo, Haim Katz, destinado a “preservar las antigüedades de Cisjordania”.

De conformidad con el “Segundo Acuerdo de Oslo” firmado entre Palestina e Israel en 1995, dichas zonas de Cisjordania están situadas en la “Zona C” bajo control israelí, tanto desde el punto de vista administrativo como de la seguridad.

En su intervención en la reunión semanal del Consejo de Ministros, el primer ministro palestino, Mohammed Shtayyeh, señaló que Israel está intentando convertir la histórica región de Al-Hawiya, famosa por sus recursos hídricos y sus estanques, en un lugar religioso y turístico para colonos isrelíes.

Shtayyeh pidió a la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) que proteja los lugares históricos de Palestina contra los planes de “judaización e israelización”.