En su constante difusión acerca de la problemática por la que afrontan los palestinos que viven como refugiados en la propia Palestina y en los países árabes vecinos, la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados palestinos en Medio Oriente (UNRWA), ha lanzado una serie de historietas acerca de la realidad de las mujeres, para generar sensibilidad acerca de esta temática.

Es así como la autora Susanna Martín, lanzó Gaza Amal cómic realizado para UNRWA Euskadi que busca desmontar los estereotipos culturales y de género sobre las mujeres refugiadas de Palestina. Sus cuatro protagonistas, Amal, Hura, Khadira y Hazeem busan acercar a la realidad de las palestinas con sus historias de personas luchadoras que buscan desarrollarse activamente hacia un mejor futuro para ellas, sus familias, sus comunidades y su pueblo.

Según la creadora estas historias buscan “sensibilizar y generar conocimiento crítico sobre la situación en la que viven las personas refugiadas en la franja de Gaza, con énfasis en la situación de las mujeres, y tratar de romper estereotipos culturales y de género, mostrando una imagen de mujeres refugiadas de Palestina luchadoras, resilientes y activas en la transformación de sus sociedades”.

Es así que como su nombre, Hazeem, una niña refugiada palestina en Gaza, es rápida como el trueno. Después de convertirse en campeona infantil de atletismo en Gaza se prepara para acudir a la competición internacional en Jordania. Pronto llega la mala noticia: las autoridades israelíes no le han concedido el permiso para abandonar la franja y poder viajar. Consciente de que su situación es la misma que la del millón y medio de personas que sufren las consecuencias del bloqueo, Hazeem elige la más valiente de todas las opciones: seguir corriendo para ser más rápida.

Su historia, junto a las de Amal, Hura, Khadira, Nur es la historia de las mujeres y las niñas de Gaza que resisten, viven, brillan. Lo hacen a pesar de un entorno marcado por la falta de oportunidades, de pobreza, de cortes de luz, de violencia de género. La realidad forzosa de 10 años de bloqueo. Sus nombres significan esperanza, libertad, fuerza, trueno, luz.

Fuente: UNRWA