Muchos palestinos rara vez tienen la oportunidad de salir de Cisjordania y Gaza, y cuando lo hacen, se enfrentan a restricciones, procedimientos complicados y condiciones de viaje incómodas. Pero los palestinos que viven en los campos de refugiados del Líbano no pueden salir de allí, e incluso salir de los campos -aunque esté legalmente permitido- es complicado no sólo porque las fronteras de los campos forman fuertes fronteras psicológicas.

En estos campos, la miseria humanitaria, las privaciones sociales y el caos urbano prevalecen entre edificios residenciales ruinosos y superpoblados, condiciones de vida insalubres y difíciles, y servicios básicos limitados y de baja calidad. Debido a las condiciones de privación económica, los niños apenas tienen la oportunidad de aprender música o a tocar un instrumento, ya que los principales problemas de los que se preocupan sus padres son las necesidades básicas, como el alojamiento, la alimentación, la atención médica y la obtención de un medio de vida. Aquí empieza el papel de la escuela de música y la asociación cultural Al Kamandjati.

Por ello, la Asociación Al Kamandjati considera especialmente significativo reunir a sus alumnos que viven en lugares separados por fronteras físicas y psicológicas para que participen en un proyecto musical compartido. Actúa en estas difíciles condiciones para ofrecer a los niños la oportunidad de acceder a la educación musical y desarrollar sus habilidades artísticas a través de la música tocando un instrumento. Al mismo tiempo, en las clases se desarrollan otras habilidades que construyen su personalidad aumentando su imaginación, creatividad y confianza en sí mismos con el estímulo de sus profesores.

Un ambiente positivo proporciona el espacio y las oportunidades adecuadas para que los alumnos toquen música y se expresen como jóvenes músicos, algunos de los cuales pueden llegar a ser lo suficientemente avanzados como para ganarse la vida como músicos profesionales en el futuro.

El plan de estudios de Al Kamandjati allana el camino para que los alumnos alcancen altos niveles académicos y les ayuda a encontrar otras oportunidades si deciden continuar sus estudios y desean asistir a colegios e instituciones musicales en el Líbano o en el extranjero. El programa académico de la asociación abarca la apreciación musical y un programa regular. La apreciación musical ofrece una introducción a la música y pretende desarrollar las habilidades de percepción auditiva enseñando a los alumnos a reconocer los sonidos naturales, los sonidos de su entorno, las voces humanas y los timbres de algunos instrumentos musicales; también enseña los estilos musicales. Esta formación introductoria ayuda a los niños a descubrir sus preferencias y a comprender los fundamentos de la música, al tiempo que les prepara para elegir el instrumento que quieren aprender.

El programa regular incluye dos cursos paralelos en los que los alumnos aprenden teoría musical y habilidades prácticas con el instrumento. Las clases teóricas enseñan a los alumnos a leer y escribir la notación musical y proporcionan formación rítmica para que los niños se familiaricen con el lenguaje musical. Los alumnos se dividen en grupos según la edad, el nivel de conocimientos y el instrumento que elijan. Pueden estudiar el oud, el qanun, el ney, el violín, el violonchelo, el piano, los instrumentos de percusión y clases individuales de canto, que reciben una vez a la semana los domingos. A lo largo del año escolar, los alumnos reciben clases teóricas durante una hora a la semana. Esto requiere un compromiso y un seguimiento porque las clases teóricas están estrechamente relacionadas con sus clases prácticas en las que aprenden a tocar el instrumento de su elección.

Más allá de la enseñanza de habilidades instrumentales, la educación musical en los campos de refugiados palestinos del Líbano es importante porque proporciona un espacio positivo y seguro. Se invita a los niños a ser creativos y se les anima a descubrir su cultura palestina y a dialogar con otras culturas.

Desde el inicio de su programa educativo en el Líbano, el objetivo de Al Kamandjâti de crear una generación amante de la música se ha llevado a cabo con éxito. La asociación puede presumir de contar con un grupo de estudiantes, músicos y cantantes avanzados que reflejan el serio trabajo realizado durante los últimos diez años. Este grupo incluye a jóvenes de ambos sexos, tres de los cuales tocan el oud, otros tres tocan el ney, y hay dos percusionistas, dos cantantes, dos violinistas y un violonchelista. Además, la escuela forma actualmente a un grupo de músicos de nivel medio y a un grupo de jóvenes estudiantes.

Los alumnos han presentado conciertos y han participado en los principales festivales del Líbano, entre ellos los celebrados con motivo del Día Internacional de la Música, los festivales libaneses y otros. Sus clases semanales y estos conciertos fortalecen las habilidades de conjunto de los estudiantes y refuerzan su confianza en el escenario, que puede ser un reto frente a un público.