Un 8 de abril de 1936 nació en Acre el poeta, escritor y líder palestino, Ghassan Kanafani, en el seno de una familia de clase media. Su padre, abogado y de confesión sunní fue maestro en diferentes escuelas francesas. Siendo muy niño, se traslada a Haifa hasta que en 1948 se ve obligado a abandonar Palestina tras el establecimiento de Israel, hecho que los palestinos llaman la Nakba o Catástrofe, exiliándose en el sur del Líbano para posteriormente asentarse definitivamente en Damasco, Siria. En dicha ciudad, Kanafani completó su formación secundaria y, posteriormente, estudió literatura en la Universidad de Damasco. En 1952, obtuvo el título de maestro de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos en Medio Oriente (UNRWA).

Durante sus estudios universitarios comenzó su actividad política, tras conocer a George Habash, con quien se unió al Movimiento Nacionalista Árabe y se trasladó a Beirut para trabajar en la revista del movimiento Al Hurriyya (independencia en árabe).

La década de 1960 fue un periodo de intensa actividad periodística y literaria para Kanafani, especialmente tras la publicación de su gran novela Hombres al Sol (1962). Esta actividad coincidió con la intensificación de la resistencia palestina contra la ocupación, principalmente tras la creación de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) en 1964.

Posteriormente junto a otros prominentes líderes palestinos, formaron en 1967 el Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP), una organización integrante de la OLP, donde asumió el rol de la orgánica de dicho partido conocida como Al Hadaf.

Kanafani escribió numerosas novelas y ensayos, que describen la trágica realidad de los palestinos bajo ocupación, en el exilio y centrándose en los niños refugiados, rodeados de miseria, anhelando y tratando de entender su identidad como palestinos.

Kanafani afirmó que los escritores palestinos “escriben para Palestina con sangre”, no como una llamada a la violencia, sino para ilustrar que la realidad de la ocupación es ineludible. “Mi posición política proviene del hecho de que soy escritor. Por tanto, mis posiciones y mis escritos son indivisibles. Tomé conciencia política por ser escritor, no al revés”.

Kanafani introdujo el término “literatura de resistencia”, entendiendo que ésta se reduce al simple hecho de que contar su propia historia es una forma de resistencia para el pueblo palestino.

En una entrevista, Kanafani explicó a un periodista australiano la importancia de la lucha del FPLP. Cuando se le preguntó si no había que evitar la muerte a toda costa, respondió que “para nosotros, los palestinos, liberar nuestro país, tener dignidad, tener el mínimo de derechos humanos, es tan esencial como la vida misma”.