Médicos Sin Fronteras (MSF) condenó el jueves el plan de las fuerzas israelíes de desplazar a unos 1.000 palestinos de sus hogares en la zona de Masafer Yatta, al sur de Hebrón, en el sur de Cisjordania.

La organización señaló en un comunicado que el recién nombrado gobierno israelí ha aprobado el plan, que tiene como objetivo una zona en la que la organización médica internacional desarrolla su actividad y su personal presta asistencia sanitaria a los residentes.

El director de MSF, David Cantero Pérez, afirmó que el plan supondría el “inminente desplazamiento forzoso” de casi toda la población de Masafer Yatta, y añadió: “¿Adónde van a ir todas estas familias? Esto es completamente inaceptable”.

En la década de 1980, Israel designó Masafer Yatta, al sur de Hebrón, como zona de tiro militar. En las décadas transcurridas desde entonces, los palestinos que viven en 12 aldeas diseminadas por la región han visto cómo sus hogares eran demolidos en repetidas ocasiones y han vivido bajo la amenaza del desplazamiento forzoso.

Según el comunicado, la situación de los residentes se ha deteriorado aún más en mayo de 2022 tras una sentencia del Tribunal Supremo israelí que eliminó todas las barreras legales al desplazamiento forzoso de palestinos de Masafer Yatta para dejar paso a la zona militar.

La declaración citaba a funcionarios palestinos que afirmaban que, en enero de 2023, la mayoría de los residentes de Masafer Yatta habían recibido órdenes de demolición y corrían riesgo inminente de ser desplazados por la fuerza.

Las autoridades israelíes han ejercido una presión extraordinaria sobre los residentes de Masafer Yatta para que abandonen la zona, incluyendo la demolición de sus casas, la instalación de puestos de control, la confiscación de los vehículos de los residentes y la aplicación de toques de queda y otras restricciones a la circulación, lo que ha afectado gravemente a la libertad de movimiento de los residentes, a su salud mental y a su capacidad para acceder a servicios básicos, incluida la atención médica, según los equipos de MSF que trabajan en la zona.

En 1999, las autoridades israelíes emitieron órdenes de desalojo para unos 700 palestinos de Masafer Yatta, con el pretexto de “vivir en una zona de fuego ilegal”.