Ocho palestinos en detención administrativa en cárceles de ocupación israelíes han iniciado una huelga de hambre indefinida en protesta por su detención administrativa injusta por parte de la ocupación israelí, según la Sociedad de Presos Palestinos (PPS, por sus siglas en inglés).

La Sociedad de Presos Palestinos (PPS, por sus siglas en inglés) ha declarado que ocho detenidos administrativos palestinos recluidos en prisiones israelíes han iniciado una huelga de hambre indefinida en protesta por su detención ilegal indefinida sin cargos por parte de las autoridades de ocupación israelíes.

Los ocho detenidos son Saif Al-Amarin, Sultan Khalouf, Kayed Fasfous, Osama Daqrouq, Mohamed Zakarneh, Anas Kmeil, Abdulrahman Baraqa y Zuhdi Abido.

La huelga de hambre se produce también en respuesta al aumento de las órdenes de “detención administrativa” aplicadas por la ocupación israelí en los últimos meses contra los palestinos.

La principal exigencia de los detenidos es que se ponga fin a la política de detención administrativa y se obligue a la ocupación israelí a respetar sus obligaciones en virtud del derecho internacional humanitario y de los derechos humanos, señaló el comité al tiempo que pedía a las masas palestinas y a las organizaciones de la sociedad civil que siguieran participando en actividades en favor de los presos.

En octubre de 2022, detenidos administrativos palestinos iniciaron una huelga de hambre masiva para exigir el fin de la política de detención administrativa de Israel, y decenas de detenidos participaron en la protesta.

El año pasado, cientos de detenidos administrativos palestinos también boicotearon las sesiones de los tribunales israelíes durante diez meses, en protesta contra la política de detención administrativa.

Desde 2011, unos 400 detenidos palestinos han iniciado huelgas de hambre individuales, exigiendo su liberación. La huelga más larga fue la del detenido palestino Khalil Awawdeh, que duró 170 días.

En mayo, Khader Adnan, detenido palestino y destacado activista, murió en una prisión israelí tras 86 días de huelga de hambre en protesta por su detención administrativa por sexta vez desde 2012.

En la actualidad hay más de 1.200 detenidos administrativos palestinos recluidos en prisiones de ocupación israelíes, la cifra más alta en más de tres décadas, según el PPS.

‘Israel’ utiliza habitualmente la detención administrativa y, a lo largo de los años, ha puesto entre rejas a miles de palestinos durante periodos que van desde varios meses a varios años, sin presentar cargos contra ellos, sin decirles de qué se les acusa y sin revelarles las supuestas pruebas ni a ellos ni a sus abogados.

Así pues, la huelga de hambre es un método de resistencia no violenta que los presos utilizan para proteger sus vidas y sus derechos fundamentales y una respuesta a las políticas racistas de ocupación a las que se enfrentan en las cárceles.