La ocupación israelí mantiene en sus prisiones a 967 detenidos administrativos palestinos, procedentes de Cisjordania y Jerusalén sin juicio, según datos facilitados por la administración penitenciaria de la ocupación israelí a la organización israelí de derechos humanos Centro para la Defensa del Individuo.
Según el ejército de ocupación israelí, los tribunales militares de la ocupación aprobaron el 90% de las órdenes de detención administrativa el año pasado, y estos tribunales cancelaron el 1% de las órdenes de detención administrativa, según datos que el ejército entregó al periódico Haaretz.
Haaretz afirma que la administración penitenciaria israelí se niega a facilitar información sobre los detenidos administrativos palestinos, incluido el número de menores y mujeres, contrariamente a los datos detallados que facilitó en el pasado.
La política ilegal israelí de detención administrativa es una medida preventiva que permite la detención de palestinos sin cargos ni juicio durante largos periodos basada en acusaciones reveladas que ni siquiera el abogado del detenido puede ver.
Las órdenes de detención administrativa están firmadas por el comandante de la región central del ejército de ocupación y se presentan ante jueces cuyos tribunales están cerrados al público.
Cabe señalar que la orden de detención administrativa es de entre 3 y 6 meses y puede renovarse de nuevo o repetidamente según la legislación israelí.