Los detenidos administrativos palestinos recluidos en cárceles israelíes iniciarán este domingo una huelga de hambre abierta en protesta por las duras circunstancias de su encarcelamiento y el trato inhumano que reciben, informó la agencia de noticias Wafa.

La noticia se produce una semana después de que el Movimiento Nacional Palestino de Presos anunciara la formación de un subcomité especial para los presos sometidos a detención administrativa -sin cargos ni juicio- en las cárceles de Israel.

Según la ONG palestina Addameer, el número de palestinos sometidos a detención administrativa ha aumentado bruscamente, alcanzando niveles nunca vistos en las dos últimas décadas.

Las autoridades de ocupación israelíes han emitido o renovado 1.302 órdenes de detención administrativa desde el comienzo de 2023, elevando el número de detenidos administrativos dentro de las cárceles israelíes a 1.200.

“En 2022, los detenidos administrativos palestinos adoptaron una postura contra la naturaleza farsesca de los tribunales militares israelíes e iniciaron un boicot. Este valiente acto de desafío tenía como objetivo exponer los prejuicios inherentes y la falta de procedimientos justos dentro de estos tribunales: un tribunal militar de un civil, un juicio sin defensa y una pena de prisión sin cargos”, dijo Addameer.

El Movimiento Nacional Palestino de Presos también hizo un llamamiento a las personas libres de todo el mundo para que hagan campaña en solidaridad con el preso Walid Daqqa y presionen a la ocupación israelí para que lo libere antes de que sea demasiado tarde. Daqqa lleva detenido desde 1986 y fue condenado a cadena perpetua por resistirse a la ocupación. Padece cáncer y su salud sigue deteriorándose debido a la política sistemática de negligencia médica de Israel.

Los detenidos son plenamente conscientes de los riesgos que corren, pero su determinación inquebrantable les impulsa a desafiar las políticas opresivas del Estado de ocupación, en particular la política de detención administrativa, una tortura psicológica que equivale a un crimen de guerra según el derecho internacional dijo Addameer.

“Esta práctica de detención opresiva de palestinos en cárceles israelíes no es una cuestión aislada, sino más bien un pilar de una política sistemática orquestada por el régimen de ocupación israelí. Dicha política allana el camino para el encarcelamiento arbitrario de palestinos sin cargos ni juicio, sólo por el mero pensamiento de un oficial de la ocupación israelí de que un determinado palestino podría ser una amenaza para su seguridad, aunque se tratara de una actividad de un sindicato de estudiantes universitarios.”

Addameer también instó al público y a la comunidad internacional a ayudar a alzar las voces de los detenidos administrativos y a difundir su causa.

“Escriban a sus representantes y exijan a sus respectivos gobiernos que presionen a las autoridades israelíes para que prohíban esta política sistemática de opresión contra los palestinos y pongan fin a esta política abusiva. Hagan sus declaraciones y diríjanlas directamente a los principales responsables políticos israelíes que son responsables de la angustia de miles de familias palestinas”, añadió.